La primera impresión que se tiene al contemplar los cuadros de Rafael Vallejo, es la de una invitación al mundo de la fantasía y la imaginación, pero también invitación a participar en un estado de gracia que solo los niños y los verdaderos artistas saben conocer. Tras haber incursionado durante un tiempo en la elaboración de cuadros “naifs” llenos de abigarradas escenas pueblerinas y multitudinarias (y que por lo demás han encontrado un espacio de exposición tanto en México como en el extranjero), ahora sentimos que Rafael, mediante la creación de un ámbito al que habremos de llamar “rafaelista” ( a falta de un titulo mejor ), a trasladado esa capacidad de ilusionarnos dentro de un espacio que para muchos es tributario de ciertas influencias “surrealistas” , pero en el que están presentes el humor y -¡claro!- también la vida cotidiana . Si el mundo de todos los días pudiera ser así, seguramente seria mas “real” viviendo de su pura fantasía.

Glen Gallardo.